MERCADO FLOTANTE
A las 5:30 de la mañana nos dejaron en Bangkok e increíblemente había bares abiertos, aprovechamos para conectarnos a Internet y quedar con Martín que había ido en otro bus.
A las 7 nos recogió una furgoneta que nos llevó al mercado flotante.
Eran canales llenos de barquitas con gente vendiendo todo tipo de comida que cocinaban allí mismo.
Nos dieron para probar diferentes frutas, algunas no las había visto nunca y la de la foto de arriba era la mejor, aunque no recuerdo como se llama. La de la foto de abajo tenia buena pinta, pero no me gustó nada.
Nos sacaron una foto cuando llegamos y a la salida pretendían vendernos un plato con nuestra cara.... lo peor es que bastante gente lo compró...
Luego nos llevaron a ver el puente sobre el río Kwai, el de la película, y allí deje tu cara.
Tenían una cría de leopardo como atracción turística........ pobriño, era precioso.
Por la noche fuimos a cenar por Bangkok y nos despedimos de Martín, al intentar llegar al hostal nos perdimos un poco y la zona no era muy recomendable así que cuando llegamos y nos sentamos tranquilamente en la terraza desde la que se veía la ciudad experimenté un momento de felicidad, jjeje así que me quedé allí un rato antes de actualizar.
El hostal estaba genial, compartíamos habitación con 10 personas más, pero estaba muy bien montado y tenías de todo, hasta internet gratis y la terraza claro, jiji, el más acogedor de todos sin duda.
Mar
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